Medianoche

De repente, no entiendo más que sucede aquí.

Abrazo fuerte a Micifuz y le pregunto ¿porqué Sakura es un idiota?

Hace dos días llegué al hotel de siempre a la misma hora, Sakura me esperaba recostado en la cama viendo un programa de televisión. En cuanto entré comencé a desnudarme como acostumbraba, con él no quería trato alguno que no fuera sexo por dinero. Sin embargo, el me observó unos instantes y antes de que terminara de despojarme de toda la ropa dijo “Hyde, hoy no pretendo acostarme contigo, solo quiero dormir a tu lado”

Me sorprendió su frase y la rebatí enseguida diciéndole que mi trabajo era darle sexo no dormir cual felices novios abrazados, se rió “Mentira! Yo pago porque tu me hagas compañía, si la manera en que requiero de tu compañía se limita simplemente a que compartamos cama, así debe ser” Me molestó pensar que tenía razón.

Sin más opción me vestí de nuevo y me senté en el borde de la cama con mi peor cara. Sakura hablaba y hablaba mi mente intentaba ignorarlo, no quiero caer de nuevo en esa sensación de que somos amigos, que él es un tipo maravilloso y que hay una oportunidad para nosotros.

Cuando decidió que debíamos dormir, ni siquiera quise meterme bajo las sabanas con él, me coloqué de espaldas a su cuerpo como aislándome de ser herido. Me abrazó mientras me murmuraba un “Buenas noches”. No pude dormir, la calidez de su cuerpo a mi lado, esa tibieza que no me pertenecía provocó en mi tristeza, quizás necesite 30 píldoras más para olvidarme de todo.