Extraño bastante a Tet-chan, paso el día escribiendo y pintando pero siempre esperando que estos tres años se vayan rápido. Quiero verlo. Seguramente cambiará tanto que no le reconoceré. Lo imagino tan diferente, será alto y fornido, con el cabello corto y un poco de barba, quizás tenga para entonces ya una novia, y no se si aun así podrá cuidar de mi como lo prometió.
En las noches pienso también cuanto cambiaré yo para entonces, y me da miedo pensar que cuando me vea piense que no soy su “Hide-chan”.
No quiero que eso pase…
No hay comentarios:
Publicar un comentario